miércoles, 16 de julio de 2008

El juego hace la diferencia

En otra oportunidad hemos hablado sobre el juego, pero hoy es nuestra intención señalar algunos puntos sobre nuestra herramienta de trabajo.
Algunos papás se acercan a Grupo Ludoteka por que le quieren acercar al niño un espacio de juego, que no sea el de la casa ni el de la escuela y está muy bien, pero sin querer le están dando más que eso.
Algunos se preguntarán qué más puede haber en un espacio tan simple donde sólo se le permite al niño JUGAR!
Nuestra tarea va más allá del simple acto de jugar, además de que el jugar es una actividad divertida y agradable , el niño al jugar realiza una serie de búsquedas, ya sea de sus emociones, de sus pensamientos, de sus habilidades, necesarios e imprescindibles para su desarrollo en la vida.
Cuando le brindamos al niño una serie de materiales y juguetes, le estamos dando más que esto, los juguetes son las palabras y el juego es el lenguaje con el que nos va a comunicar lo que le pasa internamente. Estos objetos resultan ser como mediadores para expresar lo que le sucede, el que recibe este juego y lo interpreta podrá ayudar a este niño que está comunicando algo.
El juego nos ofrece una oportunidad para desarrollar operaciones cognoscitivas y aquellos aprendizajes que aun no se han desplegado, esto se enriquece además por el intercambio grupal que sucede en este espacio. Los niños aprenden a comunicarse con los demás y expresar sus sentimientos, en la comparación con los otros pueden resolver sus dificultades ya que el espacio lúdico les ofrece una distancia psicológica segura de sus problemas y les permite expresar pensamientos y sentimientos necesarios para su desarrollo.
Todos los niños pueden acceder al beneficio de la terapia lúdica, por que los niños como dije anteriormente pueden resolver desde el manejo de la ira, la pérdida, el divorcio de los padres, crisis, traumas, como así también aquellas dificultades en el comportamiento que afectan su relación en la escuela, la hiperactividad, la falta de atención, y otros.
Los niños necesitan en los tiempos que corren un poco de atención en esto, ya no se puede jugar como antes en la vereda, en la plaza, como se hacía en otras épocas, no importan los motivos ahora.
Pero lo que sí nos debe importar es que el Juego para que sea efectivo necesita un proceso, un tiempo (no es instantáneo) y si el niño tiene dificultades hay que dárselo.
Por eso y como dije en otra oportunidad, demos la posibilidad a nuestros hijos de enriquecer su tiempo con algo que los beneficie, incentivemos en casa el juego y abramos espacios para dejar jugar.

Lic. Laura L. Leva
Directora de Grupo Ludoteka